Escritura, catarsis y redención ✍️🙏

¿Os suena la siguiente frase? 🤔

“Os dejo hasta el miércoles próximo y me pongo con los textos épicos que se salen de mi zona de confort, así que voy a tener que esforzarme mucho”

Este fue mi compromiso del miércoles pasado y no las tenía todas conmigo, pero he cumplido con él. Lo cierto es que hubo algo que me salvó de que fuera un esfuerzo sobrehumano para mí. Fue en la definición de texto literario épico cuando leí que inicialmente se escribían en verso y más adelante también en prosa ¡Ufffffff! ¡Qué alivio! ¡En prosa! 😥😥😥

Definición de los Textos Literarios Épicos

Los textos literarios épicos son aquellos que narran hechos heroicos, generalmente protagonizados por un héroe que representa los valores y aspiraciones de una comunidad. En su origen, estas historias solían transmitirse de manera oral y luego fueron escritas en verso o prosa.

Entre las obras más representativas de la épica se encuentra La Ilíada y La Odisea de Homero, La Eneida de Virgilio y El Cantar del Mio Cid.

Entre las obras más representativas de la épica se encuentran La Ilíada y La Odisea de Homero, La Eneida de Virgilio y El Cantar de Mio Cid.

No tengo mucho margen de maniobra con un relato tan corto, pero aquí tenéis un ejemplo de texto épico en prosa 👇👇👇👇👇

  “La noche era fría como la muerte. La luna llena no colaboraba demasiado con su fulgurante luz a privar del terror a quienes buscaban a sus compañeros entre los caídos. El viento rugía amplificando los alaridos de los que la espada no había dado muerte y luchaban por sus vidas. La batalla había sido cruenta por lo inesperado del ataque. Mi hermano, segundo en la línea de sucesión, empujado por los ambiciosos nobles decidió acabar con mi vida para hacerse con el trono del reino de mi padre. Mis hombres no estaban preparados. Para cuando los vigías vislumbraron las tropas y dieron la voz de alarma la fortaleza estaba siendo asaltada. Jugaban con la ventaja de ser conocedores de los puntos débiles de la misma. El pánico imperaba por doquier. Sus aliados, mercenarios de otros ejércitos, no tuvieron piedad ni con ancianos, mujeres ni niños. Entre mi guardia personal y mis soldados no lograron detenerme para salir al encuentro de mi hermano, aún a riesgo de mi vida. Iba dispuesto a cederle el trono y detener la matanza, pero cuando lo tuve delante, protegido por su guardia, comiendo y bebiendo tranquilamente mientras los que, hasta hacía pocos días, habían sido sus vecinos y amigos morían a manos de bárbaros supe que no sería un buen rey para nuestro pueblo. Dejé que se confiara y vertí en su copa el veneno que llevo siempre en mi anillo por si tengo que recurrir a una muerte digna y rápida. A los primeros síntomas lo adivinó. Y también sus hombres. Me miró a los ojos y tuve tiempo de decirle que no puede ser un buen rey quien no ama a sus siervos. Llegué a sentir el frío acero de la espada rozarme la garganta cuando, en su último estertor, en un acto de contrición alzó la mano y detuvo la del verdugo que me iba a dar muerte. “¡Servid al verdadero rey! ¡Es una orden!” - Acertó a decir en un determinante susurro. “¡Gracias hermano! ¡Me encargaré de que nuestro pueblo te honre!” – dije conteniendo la tristeza de haber dado muerte al que era sangre de mi sangre.”

Al mirar en el organigrama de la clasificación de los textos para la próxima semana me he dado cuenta que el miércoles pasado me equivoqué al decir que tocaban para ésta los textos épicos.  Los que realmente venían a continuación eran los Textos literarios ensayísticos “Errare humanum est” 🙏🙏

¡Vamos por ellos! ¡Hasta el miércoles que viene! 👋👋👋